
Estar presente
El más gran regalo que te puedes hacer
Hace tiempo, recibí un bello y manchado manuscrito en papel de Rhodia, redactado a pluma. Lo encabezaba esta frase:
"Una vez hayas practicado lo suficiente, lee la segunda parte."
Hoy lo comparto contigo.
1a parte:
"Inspira con calma.
Mientras exhalas, asegúrate de soltar el peso corporal junto a tus tensiones. Observa como sentimientos y sensaciones, vienen, hacen su recorrido y se van. Siente. Suelta. Ámate. Ama. ¡Ríe!."
2a parte:
Permanece muy presente.
Puede que experiencíes sensaciones de hormigueo, burbujeo, calor, frío, vibración, etc. Si en tu mente aparece algún tipo de sentimiento (tristeza, alegría. enfado, etc), fíjate en qué zona de tu cuerpo se manifiesta y permítete expresarlo sin palabras: llora, ríe, gruñe, grita... Los sentimientos que no exteriorizamos se acumulan en nuestro pecho y plexo solar, dañándonos y dañando nuestro entorno.
Al regalarte a ti mism@ esta sencilla forma de descanso, te darás cuenta de que el mar, los árboles, el sol, las nubes, una risa, los pensamientos, un abrazo, un dolor, gente en un mercado, alguien tosiendo, coches pasando, tú mism@; todo te pertenece, y tú le perteneces a todo. No necesitas hacer esfuerzo alguno.
Eres amor más allá de tu cuerpo y de tu mente, del espacio y del tiempo."
Y.